martes, 28 de agosto de 2012


Shiatsu Terapia
El “Shiatsu” es un tratamiento de origen japonés, cuyo objetivo es el de mejorar la salud, estimulando la capacidad natural autocurativa del organismo a través de presiones (dígitopresión) que se reparten por todo el cuerpo.

Es aplicable en molestias musculares, fibromialgia, dolores de espalda, cervicalgias, lumbalgias y ciáticas, tendinitis, tortícolis, estrés, insomnio, migrañas, trastornos digestivos, embarazo y post-parto, desórdenes menstruales entre otros.

La terapia shiatsu hace tomar conciencia al paciente, a través de la evaluación,de su estado general e intenta que se responsabilice de su propia salud para llevar a cabo los cambios necesarios que eviten la posibilidad de llegar a una fase de agotamiento.

Cuando comprendemos que no es tan importante el factor estresante como nuestra reacción hacia él, nos adelantamos a la cascada de tensiones evitando toda la sobrecarga posterior que produce el estrés. Así, podemos abrirnos a un camino de mayor bienestar, pensar de formas más creativas, ver nuevas oportunidades, mejores alternativas, llegar a ser más flexibles, adaptables y sentir que a pesar de las circunstancias externas podemos vivir satisfactoriamente. 

Algunas patologias que trata el shiatsu
En el cuello y los hombros:
Actúa descontracturando los músculos de la zona, calma los dolores generados por la artrosis, desbloquea la circulación hacia la cabeza, elimina los dolores de la misma y los mareos.

En la cabeza:
Cefaleas, migrañas, neuralgias del trigémino, estimula la circulación en el cuero cabelludo.

En la cara:
Parálisis facial, neuralgias del trigémino, fatiga visual, migrañas, zumbido de oídos. Normaliza la rigidez de los músculos faciales, estimula las glándulas sebáceas lubricando naturalmente el cutis, etc.
En la espalda y cintura:
Calma y relaja los músculos de la zona dorsal y lumbar, ciatalgias y los dolores provocados por la artrosis, pinzamientos, discopatias, hernia de disco, zona glúteos, etc.

En las extremidades superiores e inferiores:
Todos los dolores musculares y articulares, dificultad motora, problemas en los hombros, brazos, caderas, rodillas, tobillos, manos y pies, periartritis, tenditis, etc.

En el abdomen:
Acidez, estreñimiento, digestión lenta, dolores en general, etc.